Tema III.b: Características micromorfológicas de las drogas vegetales.
Características y función del tejido fundamental o parenquimático (nutricio). Parénquima clorofílico, reservante, aerífero y acuífero.
La masa principal del cuerpo de las plantas herbáceas está formada por el tejido fundamental o parénquima.
La membrana, en general poco engrosada de las células parenquimatosas, se compone de estratos elásticos de celulosa y raramente está lignificada. El citoplasma de estas células incluye grandes vacuolas que pueden contener sustancias nutritivas. Las células del tejido parenquimatoso realizan funciones diversas como las de almacenamiento de sustancias y agua.
De acuerdo con la diferenciación funcional, se pueden distinguir cuatro tipos de tejido fundamental o parénquima:
Se encuentra en las partes verdes del vegetal. En las hojas está limitado en ambas caras por una epidermis. La diferenciación anatómica de este parénquima está en correspondencia con las funciones principales de la hoja.
Es rico en cloroplastos y está situado en células cilíndricas dispuestas perpendicularmente a la superficie y recibe, a causa de su aspecto al dar un corte transversal a la hoja, el nombre de parénquima en empalizada.
Sus células están separadas por espacios intercelulares y a continuación hacia la cara inferior de la hoja se dispone otra estructura mas pobre en clorofila, el parénquima esponjoso o lagunoso.
Sus espacios intercelulares son en general más amplios y están en comunicación con los estomas, siempre abundantes en la cara inferior de la hoja.
Carece de cloroplastos y tiene como función almacenar sustancias alimenticias que serán utilizadas más tarde por el vegetal, por ejemplo, almidones, lípidos, azúcares y otros principios activos.
Este parénquima tiene grandes espacios intercelulares y es abundante en los rizomas, tubérculos, bulbos y tallos aéreos.
Es característico de las plantas que viven en lugares acuáticos y semiacuáticos.
Está formado por células de forma irregular, con grandes espacios intercelulares que facilitan el intercambio de gases en los órganos sumergidos de dichas plantas.
Los espacios intercelulares están en comunicación con el aire atmosférico por medio de estomas situados en las hojas y tallos emergidos o flotantes.
Es característico de las plantas que viven en lugares secos como los cactus. Este tejido tiene funciones de almacenar líquido durante los períodos de lluvia y reservarlos para tiempos de sequías.