Tema II: Farmacoergasia
Técnicas y requisitos para la conservación de las plantas medicinales
El buen estado en el momento del consumo de las plantas medicinales depende directamente de la forma, el lugar y el tiempo de almacenaje, es decir, de las
técnicas de conservación de las plantas medicinales.
La efectividad de los principios activos en el tratamiento terapéutico está garantizada si se evita la contaminación externa tanto por hongos como por otras especies vegetales.
Ambas pueden provocar reacciones dentro de los componentes que alterarían los beneficios que de ella se espera.
El éxito de obtener una buena conservación de las plantas medicinales y de un correcto proceso de extracción radica en la aplicación de una eficaz técnica de secado. A través del secado se promueve la conservación de sus componentes y las propiedades medicinales evitándose además la proliferación de indeseados microorganismos. Con estas técnicas se logra además una correcta presentación comercial para que sean atractivas y promuevan la confianza en su utilización.
Partiendo de estas condiciones el secado se puede realizar de forma pasiva colocando el material vegetal sobre bastidores que permitan la acción del aire por todos lados y que puedan removerse o espaciarse periódicamente para que el proceso se realice de manera uniforme en toda la masa. La colocación debe hacerse distanciado del suelo para evitar cualquier tipo de contaminación, en capas delgadas que permitan una aireación uniforme y guardarlos bajo techo para evitar la acción del rocío nocturno y el sol diurno.
Cuando son pequeñas cantidades que se deseen secar para un uso doméstico las plantas pueden colocarse en manojos invertidos. Este método no garantiza el control ambiental para su conservación. El tiempo de secado dependerá de los índices de temperatura y humedad a los que estará expuesto el vegetal.
Cuando las cantidades de plantas a procesar son volúmenes grandes, se requieren otras condiciones para garantizar el control del proceso y de esta manera lograr producciones de mayor calidad, homogeneidad, amigables con el medio ambiente y de relativos bajos costos.
Los parámetros generales son:
• Humedad relativa ambiental baja (40-60°C)
• Local con suficiente capacidad para disponer el material a secar
• Acondicionamiento tecnológico elemental para dirigir el flujo de aire con control de temperatura (35-45°C) hacia las plantas.
El tiempo de secado y las características finales del producto se determinan, generalmente, bajo las condiciones específicas prácticas a las que fueron sometidas las plantas en cada tipo de secadero y estará entre 2 a 3 días en verano y de 3 a 6 días en otoño.
Estas condiciones requieren de una inversión económica que responda a los objetivos que se persiguen.
La conservación de las plantas medicinales debe hacerse en lugares secos y limpios, sin refrigeración, bajo la sombra y que no estén expuestas a las radiaciones solares directas. La excesiva humedad es causa del deterioro progresivo de las plantas medicinales.
Los envases para su almacenamiento pueden ser diversos pero los más útiles son recipientes de vidrio o cerámica, opacos y cerrados. Cuando se almacena en grandes cantidades pueden utilizarse sacos que tengan estas propiedades para la protección.
Observando estas condiciones puede lograrse que las plantas medicinales tengan una vida útil de alrededor de un año.
La pérdida de sus características se puede apreciar por el cambio de aroma o de sabor en comparación con el habitual. En ese caso se recomienda desecharlas y adquirir
nuevas.
Dylan (viernes, 03 abril 2020 20:26)
Me encantó me ayudó en mi tarea me gusta mucho
john (jueves, 28 noviembre 2019 00:42)
Horrible información yo quería las partes
Romel Anselmi (viernes, 10 junio 2016 21:07)
Gracias muy buena información
Anielka paz (miércoles, 24 junio 2015 01:05)
me gusta porque es importante saber mas y nos ayuda en nuestras tareas
Brenda (domingo, 19 octubre 2014 03:02)
Me gusto, me alludo en mi tarea
loreiby (miércoles, 12 febrero 2014)
que buena esta pagina me ayudo en una exposicion